sábado, 29 de octubre de 2022
Henri Dutilleux. Timbres, espace, mouvement (La Nuit étoilée) (1978-1992)
viernes, 21 de octubre de 2022
Wolfgang Rihm. Marsyas (1998-1999)
Esta historia es la que inspiró a Rihm la rapsodia para trompeta que se puede escuchar a continuación. Siempre expresionista y preocupado por llegar al público, añade una marimba y siete tambores que dialogan con una trompeta magistral.
Hay un momento jazzero de la trompeta que me recuerda al Concierto para trompeta “Nobody knows de trouble I see” de Bernd Alois Zimmermann.
domingo, 16 de octubre de 2022
Magnus Lindberg. Engine (1996)
Algunos momentos de Engine hacen pensar en la banda sonora de un thriller en blanco y negro. Pero entonces el ritmo cambia y nuevos timbres nos lanzan a una loca carrera que acabará en un remanso de nuevo provisional.
Te propongo escuchar primero estos quince minutos de música intensa y vertiginosa. Después te contaré algo de su composición.
Lindberg utilizó el programa informático Patchwork para escribir esta obra. La idea es que el compositor aporta al programa decenas de restricciones melódicas y armónicas y el programa genera a partir de ellas sugerencias que el compositor maneja como material sonoro. Es interesante señalar que esto es algo que Ada Lovelace ya predijo en su artículo sobre la máquina de Babbage.
lunes, 10 de octubre de 2022
Richard Strauss. Así habló Zaratustra (1896)
La obra consta de nueve secciones interpretadas en tres momentos diferenciados. Strauss extrajo los nombres de las secciones de capítulos seleccionados del libro de Nietzsche.
I. Einleitung, oder Sonnenaufgang (Introducción o Amanecer)
II. Von den Hinterweltlern (De los trasmundanos)
III. Von der großen Sehnsucht (Del gran anhelo)
IV. Von den Freuden und Leidenschaften (De las alegrías y de las pasiones)
V. Das Grablied (La canción de los sepulcros)
VI. Von der Wissenschaft (De la ciencia)
VII. Der Genesende (El convaleciente)
VIII. Das Tanzlied (La canción del baile)
IX. Nachtwandlerlied (La canción del noctámbulo)
sábado, 1 de octubre de 2022
John Adams. Absolute Jest (2012)
Johan Adams estaba escuchando un día Pulcinella, obra escrita por Stravinsky a partir de música del siglo XVIII pero dándole su estilo, cuando se le ocurrió que él podría hacer algo parecido con su amado Beethoven, en concreto con música de sus cuartetos y scherzos de sus sinfonías: el resultado fue este Absolute Jest ('Broma absoluta'), un concierto para cuarteto y orquesta.
Es cierto que a veces la cosa no suena limpia, como si el cuarteto de cuerda y la orquesta no se entendiesen demasiado bien. Pareciera que estamos escuchando dos músicas a la vez. Pero resulta que esa falta de concierto concita una sensación de diálogo entre el pasado y el presente, como si una música dejase escuchar a la otra sin ocultarla.
También podríamos entender lo que ocurre como una lucha, como el intento fracasado de la nueva música por imponerse a la antigua. No, la música no es limpia en algunos momentos, pero eso le da riqueza y cierta sensación de viveza, de libertad, la libertad del descontrol.