viernes, 23 de diciembre de 2022

Arnold Schönberg. Concierto para piano Op.42 (1942)

El concierto para piano de Schönberg es dodecafónico, pero a veces la tonalidad parece asomar la cabecita. Lo mismo pasa con el romanticismo, que creemos escuchar aquí y allá, como queriendo emerger de entre las series de notas. 

Cuando la facilidad surge en la obra de un autor difícil hay que pensar en felicidad creativa, en un momento de encuentro, en la coronación de una cima. Suelen durar poco, porque siempre hay una cima un poco más alta que escalar un poco más allá: por eso hay que disfrutar de esos momentos como lo que son, oro puro.

Aunque no aparecieron en la edición final, en el manuscrito de la obra Schönberg anotó una frase en cada una de las partes del concierto: "La vida era tan fácil", "De repente estalló el odio", "Se creó una situación grave" y "Pero la vida continúa", haciendo referencia a la vida de los que, como él, tuvieron que huir del nazismo y emigrar. 


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Arnold Schönberg. Autorretrato en azul. 1910


viernes, 16 de diciembre de 2022

John Adams. Grand Pianola Music (1982)

Es esta una obra feliz. Adams se dejó llevar, dejó que las cosas surgieran, ironizó consigo mismo, se divirtió. No he traducido el título, pero sería 'Música para pianola de cola', lo cual ya en sí es una broma, sobre todo porque no aparece ninguna pianola.     

Aunque la composición tiene dos movimientos, el primero tiene una parte rápida y otra lenta tras la cual llega su "bombástico" final repleto de dramáticos crescendos.

Una fiesta.  
 

Los movimientos son:

  1. Part 1A (rápido)
  2. Part 1B (lento)
  3. 'On The Dominant Divide' (rápido)

John Adams explica la obra en su página oficial

martes, 13 de diciembre de 2022

Avner Dorman. Doble concierto para piano y violonchelo (2019)

Conocí a Avner Dorman a partir de su obra Memory Games, una de las piezas que Hilary Hahn incluyó en su trabajo In 27 Pieces: The Hilary Hahn Encores.

Un concierto para instrumento solista es siempre un juego de tensiones entre la orquesta y el instrumento. Un doble concierto multiplica las tensiones al interactuar los solistas no solo con la orquesta sino entre ellos. En este caso hay que incluir una interacción más, la que se produce entre el neoclasicismo del pasado y las formas de la música contemporánea. 

El resultado tiene momentos acariciantes, otros evocadores y bailarines, algunos inquietantes.


Dorman habla de su obra en Wise Music Classical.

domingo, 4 de diciembre de 2022

Tomás Marco. Espacio de espejo (1990)

Esta obra es puro juego, una colección de simetrías y contrastes, una sucesión de cambios de timbres y de ritmo que nos lleva de lo saltarín a lo misterioso sin solución de continuidad. Al escucharla tengo la sensación de asistir a un debate entre varias y extrañas especies de seres.
 

Marco habla de su obra: 

“La composición usa una orquesta de proporciones reducidas y con las prestaciones solísticas, tal como era la formación que se me había sugerido y se desarrolla como un trabajo eminentemente abstracto y formal en el que la expresión debe dimanar de la propia forma. Ésta utiliza una buena cantidad de procesos especulares, y de simetrías de diverso tipo, tendentes a crear un espacio propia. La espacialidad no se basa tanto en la focalización del sonido según donde se coloquen los instrumentos – aunque hay algunas preferencias sobre el particular- sino de un empleo de la sensación temporal de la música tendente a crear un espacio propio donde habitar y habitable por el oyente. En algunos momentos, los timbres se acercan a ciertos procedimientos de la música electroacústica y en otros se emplean con toda su pureza individual. Espejos tímbricos que se miran en espejos formales para crear un espacio multiespecular. Espejo también de mi propia concepción de la música y de una referencia lejana al compositor en cuyo honor surge. Juego dialéctico de relaciones y referencias que no tienen por qué individualizarse conscientemente sino que sirven de motivación a una música que debería hablar por sí misma".